PRIMAVERA SOUND 2016 – SÁBADO: ADORARÁS A POLLY POR ENCIMA DE TODAS LAS COSAS

El Primavera Sound 2016 cerrará edición con cifras récord y ese eterno debate entre el indiscutible éxito artístico y económico que representa vs. la duda de si este gigantesco dinosaurio no se ha pasado de frenada y es ya hace años el Disneylandia de la música no tan independiente. ¿Puede más la orgásmica orgía musical pantagruélica, o las incomodidades de horarios que se solapan, escenarios que no suenan como deberían, o la muchísima gente que va más por motivos hedonísticos y/o exhibicionistas que por un verdadero interés artístico/musical?

Como siempre, habrá opiniones para todos los gustos. Y cifras estimadas monumentales: y es que por primera vez en 16 años de vida del festival, la asistencia final prevista superaría los 200.000 espectadores acumulados, con todas las entradas y abonos vendidos. ¿Quién lo habría imaginado en aquel lejano viernes de 2001 en que fuimos a ver a Los Planetas, Manta Ray y compañía en el Poble Espanyol…?

Foto Èric Pàmies

La jornada del sábado ha tenido dos grandes (y obvios) nombres propios, pero vayamos por partes: el escenario principal lo ha abierto Jack Tatum con sus Wild Nothing. Horas antes, hablábamos con él.

Cada vez más decantado hacia un pop más elaborado y con miradas ochenteras, me sigo quedando con sus melodías dream-pop de ‘Gemini’ o ‘Nocturne’. Artistas locales como Joana Serrat o Manel se combinaban con la elegancia pop del crooner Richard Hawley (ex-Pulp), cuando el centro de atención de la capital mundial de la música se fijaba en uno de los grandes compositores de la historia del rock: es cierto que la edad es un hándicap, pero tener ahí delante al Mozart del siglo XX, el entrañable Brian Wilson, regalándote las canciones del imprescindible ‘Pet Sounds’ en el 50 aniversario del disco (‘Wouldn’t It Be Nice’, ‘God Only Knows’, ‘Sloop John B’…), más otros grandes éxitos de la música popular como ‘Good Vibrations’, »California Girls’, ‘Help Me Rhonda’, ‘I Get Around’, o ‘Surfin’ USA’, no puede considerarse más que un privilegio. Y encima, junto al mar, con la puesta de sol, y con la compañía de Al Jardine, Blondie Chaplin, Ricky Fataar…

Foto Èric Pàmies

Deerhunter han servido como buen calentamiento para EL CONCIERTO del Primavera Sound 2016. Que no es que lo diga yo, que soy totalmente parcial. Que lo podéis leer en cualquier otra crónica del festival de diarios, televisiones, radios, webs y blogs. O podéis hacer el ejercicio de buscar ‘PJ Harvey‘ en twitter, y a ver si encontráis una sola crítica mala. O podéis preguntarle a cualquiera de las decenas de miles de personas allí congregadas. O, sí, también podéis creerme a mi, que si algo no me hubiera gustado, también lo diría.

Tras estrenar la gira mundial de ‘The Hope Six Demolition Project‘ esta semana en Toulouse, PJ Harvey llega acompañada de 9 músicos de lujo (John Parish, James Johnston, Mick Harvey, Alessandro Stefana, Kenrick Rowe, Terry Edwards, Jean-Marc Butty, Enrico Gabrielli, y Alain Johannes). Entra en escena con vestido negro y a lo marchin’ band de New Orleans, con percusiones varias y vientos. La ambientación escénica era sobria, con una especie de nichos funerarios de fondo dando un toque algo sombrío a las también oscuras canciones de sus dos últimos discos, que han centrado gran parte del set que ha abierto con ‘Chain Of Keys’.

Han ido cayendo primero canciones del último álbum (‘The Ministry Of Defence’, ‘The Community Of Hope’, ‘A Line In The Sand’, ‘The Orange Monkey’), antes de entrar en ‘Let England Shake’ con la canción homónima, ‘The Words That Maketh Murder’ o ‘Glorious Land’. Tras ‘Medicinals’, una maravillosa versión de ‘When Under Ether‘ ha hipnotizado al público y ha obrado el milagro: silencio sepulcral en un concierto de un festival. Lo que no consiga Polly… tras ‘Dollar Dollar‘, ‘The Wheel‘ y ‘The Ministry Of Social Affairs‘, éxtasis con una crudísima ‘50 Ft. Queenie‘, ‘Down By The Water‘ y ‘To Bring You My Love‘, antes de despedirse con ‘River Anacostia‘… no le ha hecho falta ni coger la guitarra. Todo con el saxo, su vena más teatral y una presencia escénica brutal para su poco volumen corporal. Polly es todo alma. Lo llena todo con ideas, palabras e imágenes que te calan. Se reinventa constantemente, y no ofrece dos giras iguales. Es la artista más importante e influyente del rock del último cuarto de siglo. Y si alguien quiere discutírmelo, le espero abajo en la calle…

Tras el éxtasis, ya sólo quedaba rematar el festival con aderezos de esto y lo otro: Sigur Ros le han puesto atmósferas etéreas a la noche; Julia Holter su personal propuesta de piano.

Parquet Courts ese oscurísimo pop que tanto bebe del punk británico setentero como del indie universitario americano de los 90 (enorme final de concierto adrenalínico!); o Ty Segall toda su grasienta caballería garajera. Y aún con DJ Coco pinchando como debe estar a la hora que escribo esto, ya sabemos que el 15 de junio de ponen a la venta los primeros abonos del Primavera Sound 2017, que se celebrará del 31 de mayo al 5 de junio. Con todos los berrinches que hayamos podido pillar estos días, por una y mil razones, estamos contando las horas para que llegue, hay que admitirlo.

Crónica Ignasi Trapero | Fotografías Toni Rosado

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