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Crítica de cine: La Gran Estafa Americana

Escrito por scannerFM el 15/02/2014

Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.

David O. Russell y su equipo de vestuario y peluquería nos toman por tontos y engañan a la academia con una de los peores films del año (que encima tenemos que soportar durante más de dos horas).

En American Hustle la cosa es sencilla: un Christian Bale gordo, calvo y supuestamente inteligentísimo es atrapado junto a su amante pelirroja por un agente del FBI con rulos que les obliga a colaborar con ellos persiguiendo a corruptos y mafiosos. Y no hay más, porque la historia es tan facilona y sus pocos giros tan predecibles que hasta un niño de 10 años podría escribirla. Ni un reparto de estrellas ni una cuidada sección de arte son suficientes para aguantar el guión, escrito en este caso por Eric Singer y Russell, que flojea por todas partes y al que le sobran momentos de vergüenza ajena como la Jenni bailando a ritmo de Paul McCartney o Bradley Cooper montando a su jefe cual perrito en celo.

Scorsese sólo hay uno y eso lo sabemos todos, aunque parece que algunos se empeñan en buscarle sucesores que ni por asomo le llegan a la suela de los zapatos. Seamos claros, The Fighter fué un espejismo, David O. Rusell debería dedicarse a la pequeña pantalla o a dirigir videoclips para Justin Bieber, Yo que pensaba que nunca podría llegar a detestar una película con De Niro haciendo de mafioso….estaba equivocada.

Citando a nuestro director de contenidos Jordi Herrero acabamos de despedazarla: ‘Si ha American Hustle le quitas los escotes, los peinados, la banda sonora, el aire setentero y la cámara lenta se queda en un telefilm de mangantes, trileros y canallas de domingo tarde en Antena 3. Es como aquel pivón con el que te acuestas una noche de suerte y te la encuentras por la mañana sin maquillaje, sin pestañas, sin penumbra, sin vergüenza y sin aquel brillo en los ojos y dius: «Me han estafado»‘.