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Crítica de cine: La Venus de las pieles

Escrito por scannerFM el 07/02/2014

Roman Polanski se rinde a los encantos de una Emmanuel Seigner bipolar en un excelente trabajo donde la protagonista se ríe de los tópicos del sadomasoquismo.

Basada en el texto de Leopold von Sacher-Masoch y en la adaptación teatral de David Ives, el director confirma sus grandes dotes de coreógrafo llevando a su propia mujer y al gran Mathieu Amalric a lugares donde seguro que nunca habían estado antes.

Con un único espacio escénico en el que recrearse como ya hiciera en «Un Dios Salvaje», el director, a sus 80 años parece que ya está de vuelta de todo y ahora lo que quiere es divertirse, por poco comercial que el resultado sea a ojos del espectador medio y por pocas estrellas que aparezcan en pantalla. Aquí hay pocas y la que más brilla es Seigner, que interpreta a una actriz choni madurita y descarada. Pero no a una cualquiera…una choni con un as debajo de la manga y una seguridad en si misma con la que coge la batuta de la audición para ponerlo todo patas arriba y transformar al director de la obra en su abnegado esclavo: Amalric. O lo que es lo mismo, un clon del propio Polanski al que muchos querrían ver también sometido por ella.

Un claustrofóbico y obsesivo juego sexual (como a él le gustan) situado en un teatro parisino venido a menos, donde la cuarta pared se rompe y los personajes pasean entre el texto de la obra y la «realidad» para involucrar al espectador en el retorcido psicoanálisis.

Quince años han tenido que pasar para volver a ver a la pareja en acción, quince años que le han sentado muy bien a la actriz de la que todos nos enamoramos en Lunas de Hiel y a la que la edad y experiencia le permiten entrar y salir de la piel de dos féminas muy diferentes como quien no quiere la cosa. Un duelo interpretativo de alto nivel de los que no abundan y con el que cualquier cinéfilo disfrutará hasta el último minuto.