La evolución de The Horrors: crónica de su concierto en Barcelona

The Horrors saltaron a escena hace ya algo más de 10 años con su debut “Strange House” , toda una declaración de garage punk con una estética gótica muy arraigada. Lejos quedaron esos tiempos de dandys con lápiz de ojos y botas puntiagudas, y de hecho su directo en la Sala Apolo de Barcelona no incluyó ninguna referencia a su álbum debut (que, siendo honestos, hubiera desentonado un poco, aunque quién mejor para hacer tales decisiones que la propia banda).

Faris Badwan y los suyos están muy seguros de su nueva propuesta, “V”, y eso quedó plasmado en un concierto de hora y media en el que la mitad de los temas pertenecían a su último álbum, producido por Paul Epworth y publicado en su sello Wolf Tone. Empezando el concierto con Hologram y Machine (primer single de su último álbum), estructuraron su directo en bloques, por álbumes. Así, llegó la triada Who Can Say, Mirror’s Image y Sea Within A Sea, tres temazos como tres soles pertenecientes a “Primary Colours”, con los que se pusieron al público en el bolsillo. Con este segundo álbum dieron un inesperado giro musical de la mano de Geoff Barrow (Portishead), y el tiempo ha puesto a este álbum en su lugar como uno de sus mejores, si no el mejor. Los ocho minutos de Sea Within A Sea son ocho minutos de puro krautrock que forman parte de la amalgama de sonidos psicodélicos, drone y shoegaze que forman “Primary Colours”.

Retomando “V”, llegó el turno de las nuevas Weighed Down y Press Enter to Exit, bien recibidas por el público, aunque justo antes de entomar los bises llegó el momento reservado para “Skying” (su tercer álbum, y el primero autoproducido), del que rescataron sus hits Endless Blue y Still Life, para dejarlo ahí en lo más alto. Cerraron el concierto con Ghost y la épica Something to Remember Me By.

Lejos de apoltronarse en un único estilo, The Horros han sabido evolucionar hacia nuevos sonidos, afianzando a sus seguidores álbum tras álbum y madurando como artistas.